De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2019 la diabetes fue la causa directa de 1,5 millones de defunciones y, en 2012, 2,2 millones de personas fallecieron como consecuencia de la hiperglucemia.
Asimismo, el número de personas que padecen diabetes aumentó de 108 millones en 1980 a 422 millones en 2014 .
Por lo general, esta enfermedad ha aumentado más en países subdesarrollados.
LEER MáS: Poca claridad y condiciones para el regreso a clases presenciales en Quintana Roo
Según la información de la OMS, la diabetes es una enfermedad crónica la cual se presenta cuando el páncreas no secreta suficiente insulina o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que produce.
Para entender mejor, la insulina es la hormona reguladora de la concentración de glucosa o azúcar en la sangre.
La OMS afirma que, en ciertos casos, la diabetes puede causar ceguera, insuficiencia renal, infarto de miocardio, entre otros.
Recomendaciones para el cuidado de niños con diabetes en el ámbito escolar
La doctora Alicia López Forero, gerente médico para Novo Nordisk México indica la importancia del conocimiento del diagnóstico de diabetes en al ámbito escolar.
“El desconocimiento de una condición médica de los estudiantes imposibilita al personal educativo estar preparados e informado”, asegura López Forero.
“Esto implica que el personal de la escuela no podría actuar oportuna y adecuadamente ante una complicación de un chico con diabetes tipo 1, tales como las hiper o hipoglucemias”.
En este sentido, el conocimiento del diagnóstico en el ámbito escolar permitirá conocer síntomas.
Tener la capacitación correspondiente para poder brindar la atención necesaria al estudiante.
Según López Forero, de no saberlo se puede perder tiempo muy valioso que pone en riesgo al paciente ante cualquier complicación.
En la misma línea, la Fundación para la Diabetes de Novo Nordisk México recomendó.
Los siguientes consejos para facilitar la integración y desarrollo de los niños con diabetes en el ámbito escolar.
LEER MáS: Alumnos regresan a las aulas en Cancún
Una primera recomendación para el cuidado de niños con diabetes en el ámbito escolar es ajustar el tratamiento del niño o adolescente de manera correcta dependiendo de sus niveles de glucosa.
Estos niveles pueden variar a lo largo del día por diversos factores como el consumo energético, estrés, los alimentos que se ingieren, el tiempo de ayuno, entre otros.
Por ello, recomienda la Fundación para la Diabetes, es importante la constante medición.
Las inyecciones de insulina en el día también son un factor importante a tomar en cuenta en el ámbito escolar, ya que la mayoría de los niños requieren tres dosis al día antes de cada alimento.
En 2021 ya existen jeringas precargadas con apariencia de bolígrafos, las cuales han facilitado mucho estas inyecciones.
El monitoreo en sangre es otra recomendación fundamental, pues los niños con este padecimiento necesitan medir con frecuencia sus niveles de glucemia para no correr riesgos de que estén bajos o demasiado elevados.
Es importante facilitar la realización de estas mediciones en el horario escolar, ya sea en clase o en un lugar higiénico.
Cuando se trata de los alimentos, el control de las comidas debe ser primordial para mantener al niño saludable y evitar descontrol en su glucosa.
Respetar horarios es necesario, y si la escuela cuenta con un comedor.
Los menús deben ser equilibrados en variedad y cantidad, con la supervisión de los padres y el personal del colegio.
Finalmente, los menores con diabetes deben realizar actividad física para poder estar saludable, pero debe de ser supervisado.
Cabe mencionar que el ejercicio aumenta el consumo de glucosa por el músculo y hace que disminuya la glucemia mientras éste se realiza.
Sin embargo, en las horas posteriores a realizar ejercicio, este puede incrementar el riesgo de hipoglucemia.
En las horas sucesivas y hasta 18 horas después, sobre todo en los ejercicios intensos no habituales.
Aunque el padecimiento de diabetes haya aumentado en el mundo y se presente en los niños y los jóvenes de manera más común de lo que piensa, con el tratamiento adecuado se puede controlar.
Por ello, si un menor o joven padece dicha enfermedad, los padres deben de procurar que este lleve una vida de lo más normal posible.
Siempre con los cuidados adecuados.
Síguenos en Google News y mantente informado las 24 Horas