Alfredo huerta
Comisión de Inversiones Financieras del IMSS presentó su informe anual.

Después de un riesgo de quiebra afectada por la pandemia en el 2020, parece que los tiempos de Aeroméxico, de sus accionistas, clientes, empleados y proveedores marcará una nueva etapa. El día de ayer Grupo Aeroméxico, S.A.B. de C.V. con clave de AEROMEX en la BMV, divulgó en un evento relevante que Aeroméxico ha consumado su Plan de Reestructura exitosamente y ha salido de su procedimiento bajo el Capítulo 11.

El valor de capital de la Compañía reestructurada es aproximadamente de US$2,564 millones de dólares, y las nuevas acciones listadas en circulación ascienden a 136,423,959. Así el monto total autorizado de acciones emitidas por la Compañía es de 150,066,355 acciones. El valor teórico de las nuevas acciones es de aproximadamente $389.0187 pesos por acción.

Los mayores accionistas de la Compañía incluyen fondos administrados por Apollo Global Management, Delta Air Lines, así como existentes y nuevos inversionistas mexicanos que forman el grupo de control de voto, además de The Baupost Group, Silver Point Capital, Oaktree Capital Management y otros fondos.

Adicionalmente, inversionistas clave están fondeando nueva deuda para la salida de la Compañía (exit debt) en aproximadamente US$762.5 millones de dólares a través de nuevas notas emitidas en los Estados Unidos denominadas en dólares. La Compañía ha logrado acceso a aproximadamente US$1,500 millones de dólares en nuevo capital. Invertirá US$5,000 millones de dólares en flota en un periodo de cinco años.

De conformidad con las resoluciones de las Asambleas de Accionistas, se integró un nuevo Consejo de Administración, el cual está compuesto por una mayoría de ciudadanos mexicanos y miembros independientes, con la participación continua de los inversionistas controladores mexicanos existentes, del Presidente del Consejo, Javier Arrigunaga, y del Director General, Andrés Conesa.

¿Desaseo en el poli?

Nuevas denuncias son detectadas en la Auditoría Superior de la Federación (ASF), de David Colmenares, con relación a la compra del aseo IA-011B00001-E32-2022, realizada en el Instituto Politécnico Nacional (IPN), de Arturo Reyes Sandoval, pero también han sido dirigidas a la Secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, al secretario de Gobernación, Adán Augusto López, e incluso al mismo portador de la banda presidencial, pues en un documento se acusa de saqueo a Javier Tapia Santoyo, encargado de la Secretaría de Administración, al articular un entramado en que se ajustan licitaciones para favorecer intereses particulares.

Eso no es todo, se filtró un correo con la propuesta de Joad Limpieza y Servicios; ahí se detecta la falta de firmas en manifiestos y cartas requeridas, ausencia de folio en cada hoja, así como la inexistencia de un manual de operaciones por cada uno de los 105 inmuebles, localizados en Ciudad de México. Se argumenta que el resultado debió ser descalificarla, no obstante, ahora que la compañía entrelazada a José Juan Reyes Domínguez ha iniciado labores se solicita la rescisión de contrato por superar plazos de ley para comprobar afiliación de trabajadores en el IMSS, no entregar a tiempo materiales y equipo, además de supuestas intenciones para que los administradores de los edificios engrosen las listas de asistencia, aun cuando se limpie con el mínimo personal permitido.

@1ahuerta