Este nuevo proyecto pretende traer mariachis de otros lugares que vengan a enriquecer la escena cultural de este destino

Gilda Piña

Cerca de 20 años de promover la música vernácula en Cancún, no han sido suficientes. A pesar de las altas y bajas de la vida, la cantante Marcela Anzures se levanta cada día para trabajar en sus proyectos, y uno que la ocupa actualmente es promover la música, en especial, la de mariachi.

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Y es que en esta ciudad, son pocas son las agrupaciones que cumplen al cien por ciento con las características, se hace necesaria la creación de una escuela en Cancún para la formación de mariachis.

“Hay un nuevo proyecto que es traer las galas de mariachi a Cancún, entonces este primer proyecto que acaba de presentarse en el Teatro 8 de octubre el sábado es como el inicio de una serie de presentaciones para el público cancunense”, dijo.

Este nuevo proyecto pretende traer mariachis de otros lugares que vengan a enriquecer la escena cultural de este destino, además de que se de un encuentro con las agrupaciones locales.

En un futuro pretendemos que haya talleres, que las galas puedan ser públicas, que se puedan presentar en eventos abiertos al público y que podamos tener diferentes mariachis, no sólo de México, también del extranjero”, manifestó la entrevistada.
En Guadalajara, de donde este originaria Marcela, este proyecto se realizó hace 20 años con el nombrado Encuentro Internacional de Mariachi, y a la artista le tocó ser testigo del nacimiento de esa iniciativa. “Me gustaría replicarlo, Cancún es una ventana al mundo y me encantaría que la gente conociera aquí lo que es el mariachi, pero el institucional”, dijo.

Mencionó que en este destino los mariachis a veces son agrupaciones que no conocen los géneros y que creen que por vestir de esa manera con moño y sombrero ya son mariachis y no tiene su tipo de traje, sus canciones y sus instrumentos.

“El mariachi es de ocho integrantes mínimo y si no los tiene es un grupo musical. Entonces como que han denigrado mucho esta música, es como decirle a un cuarteto que es una filarmónica, pero la idea es rescatar la tradición”.

El mariachi, que el pasado fin de semana visitó Cancún, es el Mariachi Monumental Quevedeño de Nayarit quienes ofrecieron un concierto en el que hicieron un recorrido desde la música clásica hasta cumbia, por lo que fue exquisito para el oído de los asistentes.
“Es una agrupación que tiene la capacidad de mantenerte enganchado durante toda la presentación”, dijo la cantautora.

“Uno de los objetivos de traer al mariachi es poder motivar a la juventud de aprender la música de mariachi y crear una escuela, ya que muchos de los músicos que existen en este destino se han formado en la práctica y en la necesidad de trabajar”, explicó.
La artista y escritora también se prepara para presentar una obra de su autoría “Entre la Diva y la Muerte” en noviembre en el Foro Cultural La Catrina, así como para participar durante lo que resta de este año en actividades altruistas.