José Ureña

Apenas entregó el Gobierno de Hidalgo, Omar Fayad inició una campaña.

Buscó a todos sus excolaboradores, a senadores, diputados locales y federales y estableció contacto con regidores y mandos priistas.

Usa dos frases recurrentes:

-¿Estás con Carolina (Viggiano) o conmigo?

-¿Te quedas o te vas con nosotros?

La primera pregunta se refiere a la secretaria general del PRI y contra quien hizo campaña como candidata a gobernadora.

Y la segunda es si se quedan en el partido –“con Alito, con Carolina”, les precisa- u organizan una diáspora sin proporciones desde 1987 con la Corriente Democrática de Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo.

Muchos lo han seguido.

Tienen dos opciones: en primera instancia MC de Dante Delgado o el Verde, vías indirectas de integrarse al Gobierno y a su movimiento.

-Estamos en negociaciones -les adelanta.

LA MAYOR DIÁSPORA

Omar Fayad es uno de los cuadros priistas vueltos contra el PRI.

Él, quien fue prácticamente todo: alcalde, diputado local, procurador, diputado federal, senador, director de la Policía Federal y de Aduanas, gobernador…

Como mandatario estatal recibió de Francisco Olvera y del PRI un estado eminentemente priista, Hidalgo, y luego lo escrituró a su amigo morenista Julio Menchaca.

Él, quien en la campaña de José Antonio Meade fustigó en plaza pública a quienes dejan al partido y traicionan principios porque ya no encontraron hueso y van a mendigar posiciones a otras parcelas.

Pero no es único.

Con él se van varios y hoy formalizarán su renuncia masiva entre otros Eruviel Ávila, Miguel Ángel Osorio Chong, el propio Omar Fayad y la exdirigente Claudia Ruiz Massieu.

Es el fruto de una campaña largamente orquestada e instrumentada bajo el pretexto de no ser escuchados ni atendidos por la dirigencia de Alejandro Moreno, contra quien lanzan sus dardos.

Pero también despreciados porque Carolina Viggiano no supo arroparse con el PRI del fayadista Julio Valera y luego designó a Marco Antonio Mendoza sin respetar prelación y reglamento: no ascendió a la secretaria Jenny Márquez ni organizó Consejo Político.

Cada quien sus principios, pero la formalidad también cuenta.

CONTRA LA ALIANZA

El golpe no es nada más al PRI.

A través del escándalo van contra la alianza Va por México y el Frente Opositor por México, donde participan panistas, perredistas y representantes de organizaciones sociales.

Van de la mano con quienes, tras conocer las reglas de registro y sobre todo 150 mil firmas, han decidido renunciar porque carecen de arraigo para cumplir los requisitos.

En lugar de demostrar su popularidad, usan su impopularidad para descalificar el proceso a pesar de tener lista su renuncia al PRI, como es el caso de Claudia Ruiz Massieu.

Y 2.- Una denuncia llevada al Consejo de la Judicatura Federal de la ministra Norma Piña da cuenta de abusos y perversiones en procesos.

Los denunciantes son Elodia Sofía de Landa, Juan Guillermo Eustace, Roberto Jenkins, María Elodia Jenkins y Margarita Jenkins.

Los acusados: Luz María Ortega Tlapa, juez federal octava de Distrito de Amparo en Materia Penal; Ivan Aarón Zeferín Hernández, del Centro de Justicia Penal Federal de Pachuca, y los jueces civiles Roberto Yáñez Quiroz y José Manuel Salazar Uribe.

En la denuncia van todos los datos, ministra Piña.

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