ESTADOS UNIDOS- Estragos del Covid-19 genera más consumo de alcohol, alcohol, insomnio y sobrepeso, esto con base en una encuesta a tres mil 13 adultos que residen en Estados Unidos realizada a finales de febrero en inglés o español.

A un año que la Organización Mundial de la Salud (OMS), declarara que el nuevo virus era pandemia, un estudio de la Asociación de Psicología de Estados Unidos (APA, en inglés), arrojó esos alarmantes datos.

La encuesta Stress in America revela una crisis de salud pandémica secundaria; padres, trabajadores esenciales y comunidades de color son más propensos a experimentar consecuencias de salud física y mental”, dicen los psicólogos.

Muchos adultos dicen que han tenido cambios no deseados de peso, que han tomado más alcohol y experimentado otros cambios de comportamiento negativos que pueden estar relacionados con “la incapacidad para hacer frente al estrés prolongado”.

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De acuerdo a los resultados, un poco más de 3 de cada 10 adultos (31%) afirma que su salud mental ha empeorado en comparación con antes de la pandemia y ese porcentaje es mayor en los grupos que han sufrido más el estrés creado por una situación fuera de lo normal.

En ese sentido, el subdirector ejecutivo de APA, Jaime Díaz-Granados, de origen colombiano, señala que, en el caso de los hispanos, el hecho de que muchos tengan el inglés como segundo idioma y no como el primero es un factor determinante para que les genere mayos estrés.

Tienen un círculo de soporte más pequeño que otros grupos por ese motivo”, subraya este especialista, que opina que el estrés creado por el Covid-19 va a durar mucho tiempo, en su opinión “años”, y todavía está por ver cuáles serán los efectos a largo plazo en la salud mental.

El peso y el alcohol, en subida

En un país en el que la obesidad es un problema de salud pública, 61% de los encuestados dijo que cambió de peso desde que comenzó la pandemia. Son más los que engordaron que los que adelgazaron.

El promedio de subida de peso fue de 6.81 kilos, pero 42% ganó un promedio de 13.1 kilos y 10% más de casi 23 kilos.

El promedio de peso perdido entre los que adelgazaron fue 5.4 kilos, pero 18% perdió 11.8 kilos o más.

Además, de acuerdo a un reciente informe de la Federación Mundial de la Obesidad, 88% de los fallecimientos producidos por el Covid-19 en el primer año de la pandemia ocurrieron en países donde más de la mitad de la población tiene sobrepeso, como Estados Unidos, número uno mundial en casos (más de 29 millones) y en muertes (casi 530 mil).

La encuesta revela también que el consumo de alcohol se disparó durante la pandemia y al mismo tiempo el dormir adecuadamente se hizo más difícil.

Dos de cada tres encuestados (67%) dijeron que han estado durmiendo más o menos de lo deseado y casi uno de cada cuatro (23%) reconoció haber bebido más alcohol para hacer frente al estrés.

Padres y trabajadores esenciales, muy estresados

La pandemia ha cobrado un precio particularmente alto a los padres de niños menores de 18 años.

El 47% de las madres que tienen niños en casa que reciben enseñanza en remoto dicen que su salud mental ha empeorado y 30% de los padres coinciden.
Más de la mitad de los hombres con hijos (55%) dijo haber ganado más peso del deseado y casi la mitad (48%) reconoció haber tomado más alcohol de lo habitual para lidiar con el estrés.

Además, la encuesta reveló que la mayoría de los trabajadores esenciales (54%), como los trabajadores de la salud y los que trabajan en el cumplimiento de la ley, han adquirido hábitos poco saludables.