La sociedad civil en general está se manifiesta de acuerdo con la reapertura del Malecón Tajamar.
El mismo día en que se inició la limpieza del lugar, tras quitar los obstáculos en las entradas, los turistas comenzaron a recorrerlo.
Cientos de personas que asistieron el jueves al lugar se congratularon y celebraron junto a la alcaldesa Mara Lezama y demás autoridades municipales por recuperar un espacio que es de ellos, de todos.
Pero este es un reinicio, pues ahora restaurar el mangle afectado en los lotes donde se desmanteló ilegalmente vegetación, dar mantenimiento a las calles construidas y garantizar los servicios de alumbrado público en Malecón, son algunos de los pendientes que aún quedan por cubrir.
La noche del pasado jueves trascendió el destrabe jurídico que impedía la apertura de Tajamar, en lo relativo a la circulación y el mantenimiento del área, por parte del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
Se trataba de la desestimación del recurso de revisión que una ciudadana interpuso en contra del amparo promovido por José Luis Pineda Díaz, vecino de Tajamar, quien solicitó por vías jurídicas en 2018 la apertura de las calles de este malecón con vista a la Laguna Nichupté, que comprende unas 72.2 hectáreas.
Por unanimidad de votos de los magistrados Selina Haidé Avante Juárez, Jorge Mercado Mejía (presidente y ponente) y Leonel Jesús Hidalgo, del Tercer Tribunal Colegiado del Vigésimo Séptimo Circuito, se resolvió desechar el recurso de revisión promovido por la activista Katerine Ender, pues carecía del interés colectivo, como alegaba, por no ser vecina del lugar ni tercera interesada.
Resuelto el asunto, ya no hay ningún impedimento legal para que se abrieran las vialidades de Tajamar, como lo solicitaba en el amparo del 28 de mayo de 2018 José Luis Pineda.
LO QUE SIGUE
Ahora es tarea de la presidenta municipal de Benito Juárez, tal cual lo había dictado el Juez Segundo de Distrito en Quintana Roo, “ordenar de inmediato para que se verifique el acceso a las vialidades… que se encuentran en construcción finalizada, y dejen de estar obstruidas por cualquier objeto, reja, malla, etcétera”.
Manda también al municipio a dar mantenimiento a las calles, alumbrado público, vialidades, áreas verdes y plantas de ornato que se ubiquen sobre calles o banquetas.
El Juez también determinó que el Fonatur debe coordinarse con las autoridades municipales e incluso con la Federación, para ejecutar las obras de sostenimiento necesarias en dichas vialidades.
Por último, conmina al secretario municipal de Seguridad Pública y Tránsito de Benito Juárez autorizar y ordenar el inmediato retiro de todos aquellos objetos que impidan el tránsito.
MANOS A LA OBRA
Tajamar fue abierto durante las primeras horas de la mañana del pasado sábado, cuando se dieron cita cerca de 500 trabajadores del municipio para realizar tareas de limpieza y mantenimiento; la mayoría de ellos, de la Secretaría de Obras y Servicios Públicos municipales y otros del propio Fonatur.
El saldo fue la recolección de casi 300 toneladas de desechos vegetales. Aún queda pendiente la reinstalación de material para el alumbrado público, el cual fue sustraído a finales de 2018, lo que ameritó una demanda por parte del ciudadano Gerardo Solís.
De acuerdo con Alejandro Varela, director jurídico del Fonatur, aún no hay un estimado de cuánto costará rehabilitar el malecón y dotarlo de los suficiente.
Esto fue confirmado por la alcaldesa Mara Lezama y el equipo que la acompañó a la rueda de prensa celebrada el pasado jueves, en la que se dio el anuncio de la apertura del malecón. Sin embargo, la presidenta municipal de Benito Juárez aseguró que apoyarían en las tareas.
Carlos Díaz Carvajal, director del Instituto de Planeación y Desarrollo Urbano del Municipio, aseguró que su participación se limitará a lo que el Fonatur permita.
Por su parte, Mara Lezama aseguró que se realizarán operativos de vigilancia con Seguridad Pública, la Guardia Nacional, Secretaría de Marina y el Ejército, “porque todos están en el mismo tenor de que esta zona sea segura y que se mantenga la paz porque los espacios públicos son para la gente”.
Resaltó que el trabajo coordinado con Fonatur es que se tenga equilibrio con el medio ambiente, por lo que la propia dependencia federal hará las gestiones para continuar con el remozamiento que mejorará la infraestructura existente.
ANTECEDENTES
Vale recordar que el 16 de enero de 2016 se ingresó maquinaria pesada para desmontar mangle en Tajamar, donde se proyectaba un complejo residencial y comercial de grandes proporciones y demás desarrollos en los 41 de 43 lotes que Fonatur comercializó entre 2006 y 2015 (36 de 2006 a 2015 y otros cinco de 2013 a 2015).
Luego del desmonte, Araceli Domínguez, representante del Grupo Ecologista del Mayab, solicitó la protección del Poder Judicial, litigado por el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, a fin de que se detuvieran las obras de infraestructura que se erigirían sobre manglar, al pie de la laguna Nichupté, el cual fue concedido en junio de 2017.
Lo que se obtuvo fue una sentencia en el Tercer Tribunal Colegiado de Circuito de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la cual invalidó la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del proyecto.
Dicho amparo obligaba a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) a abstenerse de ejecutar la autorización de la MIA otorgada a Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), que permitía la remoción del manglar.
El resolutivo impide la emisión de una nueva autorización y obliga a la Semarnat a restaurar la zona que resultó afectada tras la irrupción de maquinaria en el lugar, en enero de 2016.
Además, la sentencia devino y se publicó por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) como tesis aislada, criterio que interpreta un precepto legal que no ha alcanzado a ser obligatorio, que orienta el criterio de los administradores de justicia y que sirve para formar jurisprudencia.
Luego de dos años y cuatro meses, en noviembre de 2019, la Semarnat emitió la guía para restaurar el lugar dañado.
En aquel documento, la dependencia propuso rehabilitar el flujo de agua entre varios lotes de la manzana 2 y 2A “para incrementar las condiciones ambientales que permitan la regeneración del manglar”.
Ello se hará, se especifica, mediante el retiro del pedraplén, a fin de renivelar el predio.
La segunda acción a realizar de este plan de recuperación tiene que ver con la restitución del propio manglar perdido en las zonas afectadas “mediante la reforestación”.
Dicha reforestación, se detalla, se tendrá que llevar a cabo con ciertos métodos, ya sea por la “dispersión de propágulos ÔêÆgermen, parte o estructura de un organismoÔêÆ al voleo, sistematizada y dirigida por las características de nodricismo de la especie” o por la introducción de plantas de vivero, aunque esto solo en caso de que en un año no se logra establecer el manglar por dispersión de propágulos al voleo.
O bien, se tendrá que implantar partes de la planta mangle que germinará de una semilla.
Por Ricardo Hernández