COLOMBIA.- Lorena es el nombre de la novia que tuvo que pasar después de su boda el sufrimiento por ver a sus familiares internados por Covid-19 al celebrar su matrimonio.
Durante la ceremonia cumplieron los protocolos. Los novios y sus invitados usaron el tapabocas y guardaron distancia.
Sin embargo, en la recepción, que se realizó en un salón de eventos, quizás debido al entusiasmo del momento y al estar con familiares, buena parte de los 50 asistentes se relajaron, se retiraron las mascarillas, e incluso algunos se abrazaron, omitiendo las normas de bioseguridad.
Entre los invitados había personas procedentes de Barranquilla, pero la mayoría eran de Cali. Alguien o varios asistentes, quienes no sabían que eran portadores del virus, causaron el contagio masivo.
Después de la celebración, 15 personas comenzaron a sentir los síntomas clásicos del Covid-19 y finalmente sendas pruebas confirmaron la infección.
Dos de las personas más afectadas por el virus son los padres de Lorena, quienes debieron permanecer en camas de una unidad de cuidado intensivo (UCI), de la clínica Versalles, y aún están hospitalizados.
El padre de Lorena fue llevado directamente a la UCI, fue intubado y estuvo durante 19 días en esa área de cuidado crítico. Hoy, continúa hospitalizado y con soporte de oxígeno. A la madre de Lorena le fue un poco mejor. Permaneció 12 días en la UCI, intubada, antes de pasar a una sala de observación.
Lorena y su hermano Carlos,día a día le agradecen al personal de salud el gran trabajo realizado y la asistencia que le han brindado a sus padres, y toman esta dura prueba para aconsejar a sus amigos, conocidos y demás familiares de la importancia de permanecer siempre con el tapabocas, respetar el distanciamiento y no bajar la guardia hasta en la propia vivienda, pues nadie sabe dónde está el virus.