Aumenta robo de medicinas por la pandemia, alertaron autoridades de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris); además, varios medicamentos han sido falsificados para revenderlos a un precio menor
Los asaltos ocurren a transportes que entregan los medicamentos en los puntos de venta.
El organismo ha emitido cinco alertas sanitarias por robo y falsificación de medicamentos para epilepsia y tratamientos oftálmicos; así como para enfermedades crónicas, como diabetes, distintos tipos de cáncer y VIH, afectaciones con las cuáles es más probable desarrollar complicaciones por Covid-19.
Ante la falta de espacios como los tianguis, suspendidos por la emergencia sanitaria, las medicinas hurtadas son comercializadas en redes sociales o internet.
De acuerdo con Juvenal Becerra Orozco, presidente de la Unión Nacional de Empresarios de Farmacias (Unefarm), el robo en las farmacias se mantiene en su estado habitual; el incremento del crimen se reportó en el transporte que surte de medicamento a estos negocios.
“En estos meses que lleva la contingencia, el robo aumentó 20% y la ruta más vulnerable es la que corre por Puebla, Tlaxcala y Veracruz”, recalcó.
“El problema es que una vez que roban el medicamento también lo clonan y es lo que venden en redes sociales, el llamado sería a la sociedad para que eviten comprar medicamentos mediante este tipo de páginas, porque no tienen evidencia de que no se hayan comprometido su calidad y eficacia, lo que puede traer problemas de salud”, aseguró Becerra Orozco.
Aumenta robo de medicinas por la pandemia, mercado negro duplicaría su valor
De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica (Canifarma), el valor total del mercado negro de medicamentos en México puede casi triplicar su valor, al pasar de 650 mil a mil 500 millones de dólares al año.
Por su parte, la industria farmacéutica tiene pérdidas anuales de 10 mil millones de pesos por estas acciones.
El organismo reconoció que alrededor de ocho millones de personas consumen medicamentos robados o falsificados, lo que significa un claro riesgo para la salud, pues muchos se encuentran caducados, están contaminados o su acción no está garantizada, por lo que no ayudarían realmente a tratar las enfermedades.
El 12 de mayo fueron sustraídas siete mil 200 piezas de dulaglutida, de la marca comercial Trulicity, el cual se utiliza para controlar la diabetes mellitus tipo 2. La Cofepris alertó a farmacias y puntos de venta para no comprar este fármaco, al no poder garantizar su calidad, ya que éste debe mantenerse en refrigeración durante su almacenamiento, distribución y venta. De no hacerlo, podría no ser eficaz y no controlar los niveles de glucosa.