Las cartas ya están marcadas. O, en el argot presidencial, las corcholatas. Y como Ricardo Monreal no es corcholata ÔÇô"me parece un término denigrante"- en el Gobierno se colectiviza una pregunta: -¿Cuánto aguantará Monreal? La pregunta la contesta él: -El límite es mi dignidad. Pero el jefe del control político del Senado está en la […]