El 15 de septiembre de 2001, a las siete de la mañana, Lucelly Gil se adentró en el inmenso nubarrón de polvo tóxico que dejó el derrumbe de las Torres Gemelas en Nueva York. A partir de ese momento recogería allí escombros hasta 12 horas por día, cada día, durante seis meses. Hoy, casi dos […]