Los cocodrilos podrían ser los vecinos incómodos de los habitantes de una de las colonias más antiguas de Cancún: la Lombardo Toledano; sin embargo, no es así, porque quienes viven en la calle que colinda con el manglar son respetuosos de su entorno.
“Los cocodrilos no nos invaden como la gente piensa, porque los vecinos cuidamos su hábitat, es más, nosotros somos los que los hemos invadido”, señaló Erika Guillén con más de 30 años de vivir junto al manglar.
Los letreros del área de conservación de la Laguna Manatí son visibles, se pide no arrojar basura, no pescar, no atentar contra la flora y fauna del lugar, pero muchos hacen caso omiso, como lo menciona la vecina, quien ha visto todo tipo de sucesos ocurrir en la tercera entrada de la Lombardo, como popularmente se le conoce.
“En la noche salen a buscar comida, pero si acaso salen del borde del maglar un poco. La realidad es que hemos aprendido a vivir con ellos como vecinos, respetando su hábitat, si no los molestas no te hacen nada”.
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Cocodrilos, vecinos respetuosos de colonos de la Lombardo
Añadió que los vecinos con décadas de establecerse en la colonia Lombardo, ya se han acostumbrado a vivir a unos pasos de los cocodrilos, por lo que les da coraje cuando gente de fuera acude a atentar contra la vida o libertad de esta especie.
“Ha venido gente que los quiere capturar,los amarran, y de verdad que dan ganas de lincharlos a ellos, por no respertar esta área ya que es un delito atentar contra las especies que aquí habitan”. dijo.
Indicó que en el manglar es muy común ver a los cocodrilos tener su crías aquí, lo que por el momento no se puede apreciar del todo porque se encuentra lleno de monte.
“A veces, los vecinos tratamos de limpiar, pero nos dicen que el área está a cargo del comité de la Laguna Manatí”.
Por su parte, Carlos Gutiérrez, otro de los vecinos que transita diariamente por la orilla del manglar, dijo que el área luce muy contaminada y descuidada, debido a que la gente no respeta las indicaciones que prohiben tirar basura y no contaminar el manglar.
En la última limpieza realizada en julio se retiraron 500 kilos de residuos sólidos, principalmente de electrodomésticos y plásticos, según datos de la Procuraduría de Protección del Ambiente de Quintana Roo (PPA).
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