Por la variedad de alojamientos que ofrece Airbnb, desde los más sencillos hasta lujosos, es innegable que muchas personas prefieren esta modalidad para hospedarse, dijo Ana Pamela, propietaria que maneja rentas vacacionales en Cancún y Playa del Carmen.
Ante las nuevas regulaciones aprobadas en la reforma a la Ley de Turismo en el estado, consideró que “definitivamente hay mucha presión de los hoteleros porque quieren sacar los Airbnb”.
“Es obvio que hay muchos turistas que prefieren esta modalidad y se les ha quitado mucho hospedaje a los hoteles por la independencia, por ser una experiencia diferente”.
“Quieras o no son los detalles más personalizados en cuanto a la atención al turista, todo el tiempo se está pendiente del huésped, yo estoy dada de alta en la plataforma digital y pago mis impuestos, pero ahora quieren que tengamos una licencia de hospedaje y andan a la caza de Airbnb a ver si cuentas con ella o te clausuran, cuando el problema son las trabas que ponen las autoridades para sacar esta licencia de funcionamiento”.
Otra inquietud que expresó es que el trámite es a título personal, nadie más puede hacerlo.
Esto afecta a quienes administran muchas casas de rentas vacacionales sobre todo a propietarios que viven en otra ciudad.
“Si es cierto que el año pasado estuvo muy floja la renta en esta modalidad, pero este año se reactivó de nueva cuenta”, añadió.
En cuanto al registro de los huéspedes mencionó que hay personas que realizan la reservación inmediata.
Para ella esto es un error pues, en su caso, hace reservaciones que aprueba acorde al perfil del solicitante.
Se contempla si tiene excelentes calificaciones, viaja acompañado con la familia, en pareja y si son muy respetuosos, explicó.
Dio a conocer que el uso de cámaras en las propiedades no se puede por el tema de la privacidad.
“Eso está penado, lo que sí se puede tener es una cámara al exterior para saber si los huéspedes llegaron y si tienen algún problema al entrar, exclusivamente”.
Comentó que muchos han dejado la plataforma digital debido a la cantidad de trámites que han agregado, como el pago del predial estatal y federal.
Aunque, señaló, quedan muchos que no se rinden porque “si compró propiedades es para que le generen dinero”.
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Rentas vacacionales ya no son tan populares
Por su parte, Ana Cecilia Quevedo, directora de Marketing Consultants, que realiza investigación de mercado enfocados en el área turística, comentó que las rentas vacacionales tuvieron una explosión importante durante la pandemia de Covid-19.
Sin embargo, en la actualidad ese modelo va a la baja en Cancún; en 2023 representó el 5.8% de las rentas vacacionales.
En 2022 fue el 5.4% y en el 2021 alcanzó el 8.2%.
“Ya de nuevo están reactivados los hoteles y lo prefieren que irse a meter en una casa donde no tienen servicios”, subrayó.
Dijo que “el perfil que llega ya es mucho más bajo y el mercado se está abaratando, por lo
que muchas personas que le apostaban a este modelo de negocio se están saliendo de manera natural”, indicó.
Las variables económicas y el mismo mercado lo irán regulando hasta que se queden solo los que cumplan con las normas, precisó.
“El que es más improvisado ya no le va a resultar porque está toda la oferta hotelera, porque ya no se quiere estar aislado, sino convivir de nuevo con la gente”, concluyó.