El Congreso del Estado de Quintana Roo buscará prohibir y sancionar las prácticas de tortura en los anexos y erradicarlos.

De acuerdo con los diputados Hugo Alday Nieto y Guillermo Brahms González, la entidad fue de las pioneras en elevar las penas y prohibir las llamadas terapias de conversión.

Medida que apenas la semana pasada aprobó el Congreso de la Unión, y ahora buscarán hacer lo propio con los centros de rehabilitación conocidos como anexos.

Alday Nieto destacó que Quintana Roo está a la vanguardia en la eliminación de prácticas extremas que bien podrían ser consideradas tortura.

En el caso de las terapias de conversión, que desde hace casi tres meses ya son sancionadas por el Código Penal de la entidad.

El legislador señaló que se logró al adicionar al artículo 195-Octies el capítulo VII denominado “Delitos contra la Orientación Sexual, Identidad o Expresión de Género de las Personas”.

“Se castiga con dos a seis años de cárcel a quienes promueven, ofrezcan, impartan, apliquen, obliguen, induzcan, financien  o sometan a una persona a terapias de reconversión, a través de sesiones psicológicas, psiquiátricas, tratamientos, prácticas, retiros, campamentos o cualquier tipo de servicio que busque cambiar, reprimir, reorientar, menoscabar, restringir, anular, suprimir o modificar la orientación sexual, identidad o expresión de género de alguien”.

Hugo Alday Nieto.

Anexos, el mayor pendiente

El también presidente de la Comisión de Justicia del Congreso, reconoció que estas prácticas han sido detectadas en las cárceles del estado, sobre en la capital.

El diputado expresó que por ahora el mayor pendiente que hay es erradicar los llamados anexos, que al igual que las terapias de conversión.

Esto debido a que se basan en la violencia para “modificar” un cierto tipo de conducta, aunque la diferencia.

“Lo de las terapias de conversión lo hicimos con meses de anticipación a la federación, porque lo que se busca es evitar que se cometan otros ilícitos como la tortura, ya que se ha establecido internacionalmente que con este tipo de prácticas se viola el derecho de la persona de autodeterminarse, pero hay otras que tenemos que trabajar, como el caso de los anexos porque también violan los derechos humanos de quienes son ingresados, para tratar de revertir su alcoholismo o drogadicción”, dijo.

Punta de lanza

El diputado Brahms González consideró que el estado debe convertirse en punta de lanza en la protección de los seres humanos y respeto a la libertad.

“La preferencia sexual es libre y puedes hacer con ella lo que quieras, quienes te ofrezcan cambiarla con una de estas terapias te están engañando”, dijo.

Señaló también que, lo mismo pasa con los anexos que prometen quitarte el vicio con prácticas controversiales y tampoco es cierto.

“Somos y debemos ser punta de lanza en la protección de los semejantes y el respeto a la libertad”, concluyó.

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