Las rentas vacacionales tienen nueva regulación.
La nueva regulación para las rentas busca dar mayor seguridad y certeza a los usuarios o huéspedes, pero también a los anfitriones. Credit: Licety Díaz / 24 HQR

Una lista de requisitos e impuestos es la nueva realidad de las rentas vacacionales en Quintana Roo, tras las nuevas regulaciones que buscan dar mayor seguridad y certeza a los usuarios o huéspedes, pero también a los anfitriones, explicó Mireya “N”, quien se dedica a administrar este tipo de inmuebles en Quintana Roo y quien dejó en claro que esta modalidad se está convirtiendo en una importante fuente de ingresos para las arcas estatales, pero también en una mejor opción de hospedaje.

De acuerdo con la experta, esto desde que en abril de 2023 entró en vigor el nuevo registro de plataformas digitales de alojamiento tipo Airbnb, el cual además de hacer obligatorio inscribirse en un padrón, ya los anfitriones recaudan un gravamen del 6% por alojamiento reservado, entre otras medidas.

Trámites para las rentas

“Para tener una propiedad como renta vacacional se tiene que sacar una licencia de funcionamiento estatal, registrarse ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) de Quintana Roo y luego registrar la propiedad con el número de licencia otorgado ante la Secretaría de Turismo (Sedetur) de la entidad, ese es un trámite rápido y gratuito”, dijo.

Hizo referencia que al tener la licencia de funcionamiento, el anfitrión se compromete a pagar un impuesto de hospedaje que es del 6%, como el que pagan los hoteleros, pero que en ese caso es del tres por ciento, aparte del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA). 

De igual forma, detalló que ahora se les solicita que deben tener una licencia municipal, “la cual se estaría tramitando como lo haría cualquier local de un negocio, sin embargo, hasta el momento no se tiene claro cuáles son los requisitos, por lo que aún no es obligatoria y no la están pidiendo”.

Sobre ese punto, los hoteleros destacan esas “fallas” en la recaudación, ya que aún no es obligatorio para las unidades de renta vacacional. 

“La situación en el tema económico es complicada por todo lo que se está dejando de cobrar de impuestos, los tres órdenes de Gobierno están perdiendo, además del asunto del desplazamiento de los ciudadanos de sus viviendas por este tipo de servicios, así como la inseguridad”, aseguró Jesús Almaguer Salazar, presidente de la Asociación e Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres.

Seguridad para el huésped

Además, el líder hotelero recalcó que el tema de la seguridad de los visitantes y en este caso de los huéspedes es de vital importancia, sobre todo ante los diversos casos de supuestas páginas no oficiales de rentas vacacionales.

Al respecto, Mireya “N” recordó que existen varias plataformas de reserva de rentas vacacionales como Booking, Vrbo o Airbnb, esta última es la que exige más cumplimiento de reglas a los huéspedes, aunque todas cumplen con privacidad y seguridad.

“Sí se han dado casos en los que hay personas que hacen un perfil falso y ponen casas para estafar, pero al subir la queja a la plataforma, ésta lo comprueba y les devuelve el dinero”, puntualizó.

Depósito de garantía

De acuerdo con Airbnb, incluso se puede mandar un mensaje directamente desde la plataforma para explicar el problema y se toman medidas contra los infractores para proteger la integridad de esta modalidad.

“Esta modalidad es una forma segura, lo mismo para propietarios que para huéspedes, en la promoción por medio de redes sociales para tener rentas directas o por recomendación con amigos y familiares, en mi caso, pido depósito de garantía en caso de daños”, indicó.

Detalló que desde la llegada del huésped deben demostrar su identidad, que son realmente quienes hicieron la reserva, que siempre incluyen AirCover para huéspedes, el cual es un seguro por si surge un problema grave con el alojamiento en cuanto a daños a la propiedad y que el anfitrión no pueda resolver.

Por último, también a los huéspedes les ofrecen un seguro de viaje en caso de que surja un contratiempo o si un anfitrión cancela su reservación antes del check-in, lo que derivará en un reembolso completo.

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