El rastro de un pariente de El Mayo Zambada en Cancún
Fue en el periodo en que gobernó la priista Magaly Achach Solís en el municipio de Benito Juárez, cuando un hijo de Ismael Zambada García trabajó en la dirección de Servicios Públicos.
La mayoría lo conocía por el apellido y porque en ese tiempo (1999-2002), cuando ya gobernaba el estado Joaquín Hendricks Díaz, el cartel de Sinaloa se había infiltrado al municipio.
Cuenta una fuente que estuvo en esa administración, que el pariente de El Mayo se hacía cargo de la operación de la distribución de la droga en camiones del servicio de recolección de basura.
Este dato pone en relevancia lo que se sospechaba en esos años: que el narcotráfico ya había infiltrado varias esferas del Gobierno municipal y no como se cree, que fue a partir de 2004, año en que fueron asesinados varios agentes de la Agencia Federal de Investigación, en las afueras de la Universidad La Salle.
Hoy el cartel de Sinaloa no domina la plaza, en la que existen otros grupos que disputan el generoso mercado del turismo internacional. ¿Será?
Inicia purga el PAN quintanarroense
Durante la Tercera Sesión Ordinaria de la Comisión Permanente Estatal del Partido Acción Nacional, los comisionados aprobaron el procedimiento de sanción en contra de militantes que en los comicios del 2 de junio apoyaron a otras fuerzas políticas.
La Comisión de Orden y Disciplina Intrapartidista será la que revisará cada uno de los procedimientos de sanción y en su caso, de expulsión, de los militantes que actuaron de manera indebida.
En el acto no se dio a conocer qué distinguidos panistas colaboraron con los adversarios, pero cualquier chivo expiatorio le servirá a la presidenta del Comité Directivo Estatal, Reyna Tamayo, para expiar culpas y consolidar su liderazgo, pese a la estrepitosa derrota del 2 de junio. ¿Será?
Se declara preso político
Emiliano Ramos Hernández fue apresado en Playa del Carmen, donde se dedicaba, en calidad de coordinador de líderes de colonias, presumiblemente a comprar votos a favor de la actual presidenta municipal, Lili Campos Miranda.
Las líderes contratadas tenían la indicación de recopilar 20 credenciales de elector, las cuales eran subidas a una plataforma web; para este proceso, recibieron previamente un usuario y contraseña por parte de Emiliano Ramos. Una vez cumplido el número requerido recibían un pago en efectivo por la cantidad de mil pesos.
Ahora, desde la cárcel, en una entrevista que le dio a un medio nacional, Emiliano Ramos se declara preso político y descartó aceptar el perdón a la gobernadora o del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Confirmó, por último, que esta semana lo vincularán a proceso por una denuncia de violencia familiar, promovida por su expareja, una diputada local electa. ¿Será?