Estamos prácticamente en la temporada de frío, y ésta no solo trae consigo las celebraciones de fin de año, sino también un aumento en las enfermedades respiratorias.
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Temporada de frío: Favorecen propagación de virus
Asimismo, durante el invierno, las bajas temperaturas y los cambios en el clima favorecen la propagación de virus y bacterias que afectan nuestras vías respiratorias.
Además, Las consultas médicas se llenan, y es común ver a personas lidiando con síntomas que van desde un simple resfriado hasta enfermedades más graves como la neumonía.
A continuación, te presentamos las enfermedades respiratorias más frecuentes durante el invierno y algunas recomendaciones clave para prevenirlas.
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Las 5 enfermedades respiratorias más comunes en invierno
1 Resfriado común
El resfriado común es una de las infecciones virales más frecuentes en invierno. Afecta principalmente las vías respiratorias altas (nariz y garganta), provocando síntomas como congestión nasal, tos, estornudos, ojos llorosos, dolor de garganta y, en algunos casos, fiebre.
Aunque los síntomas pueden durar entre 5 y 10 días, generalmente no es una afección grave.
2 Influenza (gripe)
Asimismo, la influenza es una infección viral que puede comprometer tanto las vías respiratorias altas como las bajas. Sus síntomas incluyen fiebre alta, dolor muscular, dolor de cabeza, malestar general, tos seca y rinitis.
Es altamente contagiosa y se transmite rápidamente por el aire. La duración de la enfermedad suele ser de una semana, aunque puede complicarse en personas vulnerables, como los ancianos y personas con enfermedades crónicas.
3 COVID-19
Causado por el virus SARS-CoV-2, el COVID-19 comparte muchos síntomas con la influenza, como fiebre, tos y malestar general. Sin embargo, una característica distintiva es la pérdida de gusto y olfato.
Además, la única manera de confirmar un diagnóstico es a través de una prueba PCR o de antígenos. A pesar de que muchos casos de COVID-19 son leves, el virus puede causar complicaciones graves, especialmente en personas con sistemas inmunológicos debilitados.
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4 Neumonía
Asimismo, la neumonía es una inflamación de los pulmones que puede ser causada por virus, bacterias o hongos. Los síntomas incluyen fiebre, escalofríos, tos con flemas, dolor en el pecho, falta de apetito y dificultad para respirar.
Además, esta enfermedad es especialmente peligrosa para personas con sistemas inmunológicos comprometidos, como los niños pequeños, los ancianos y quienes padecen enfermedades crónicas. En casos graves, puede requerir hospitalización e incluso poner en riesgo la vida.
5 Virus Sincitial Respiratorio (VSR)
El VSR es una infección viral común en invierno, pero puede ser particularmente peligrosa para bebés menores de un año y personas mayores.
Asimismo, y a pesar de que muchas personas se recuperan sin complicaciones, los grupos de riesgo pueden experimentar dificultad para respirar y necesitar atención médica urgente.
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¿Cómo prevenir las enfermedades respiratorias en invierno?
Es conveniente mencionar que la buena noticia es que hay varias medidas que puedes tomar para reducir el riesgo de contagiarte o propagar estas enfermedades respiratorias durante la temporada invernal:
- Evita cambios bruscos de temperatura
Los cambios rápidos de temperatura entre el interior y el exterior pueden debilitar tu sistema inmunológico, haciéndote más susceptible a las infecciones. Trata de evitar exponerte a corrientes frías directamente después de estar en un ambiente cálido. - Mantén una dieta equilibrada
Alimentarte de manera saludable es fundamental para fortalecer tus defensas. Incorpora alimentos ricos en vitamina A, C y zinc, que ayudan a mantener el sistema inmunológico en óptimas condiciones. - Abrígate adecuadamente
Asegúrate de usar ropa adecuada para las bajas temperaturas. Viste en capas y no olvides cubrir tu cuello, manos y cabeza para evitar la pérdida de calor corporal. - Cubre tu boca y nariz en ambientes fríos
Cuando estés en exteriores, especialmente si hace mucho frío, utiliza una bufanda o mascarilla para cubrirte la nariz y la boca. Esto ayudará a que el aire frío no entre directamente a tus vías respiratorias. - Evita el humo
El humo de tabaco y otros contaminantes en el aire puede irritar las vías respiratorias y aumentar el riesgo de sufrir infecciones. Evita ambientes donde haya fumadores y procura mantener tus pulmones lo más limpios posible. - Mantente hidratado
Aunque haga frío, es crucial mantenerse bien hidratado. El aire seco puede resecar tus vías respiratorias, y el consumo de líquidos, como tés calientes o agua, ayuda a mantener tus mucosas hidratadas y a reducir la posibilidad de infecciones.
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Consulta médica ante síntomas graves
Si presentas síntomas graves como dificultad para respirar, fiebre alta persistente, dolor en el pecho o falta de apetito, es importante que consultes a un médico de inmediato. La atención temprana puede prevenir complicaciones graves, sobre todo en personas mayores, niños pequeños y personas con condiciones de salud preexistentes.