El Partido Revolucionario Institucional (PRI) va directo a su extinción en el 2027. En las elecciones intermedias a realizarse dentro de dos años ese organismo político corre un verdadero riesgo de desaparecer, ya que todo indica competirá solo en México por todos los cargos de elección popular.

Y es que a partir de lo que en el Partido Acción Nacional (PAN) llamaron su refundación, o reelanzamiento, el dirigente nacional Jorge Romero sostuvo que ya no habrá alianza con el tricolor, puesto que lejos de sumar, resta frente al electorado.

¿Cuáles son los cambios del blanquiazul? El cambio de logo y la aseveración de que no habrá alianza, sobre todo, como ya dijimos, con el Revolucionario Institucional. 

Pues bien, esa renovación -que podría no servir de mucho al PAN si no cambian de estrategia a la hora de postular a sus candidatos y van con las mismas caras de siempre- podría ser la tumba para sus ex aliados, ya que ahora sí tendrán que postular candidatos en solitario.

Al tricolor le pesan las siglas, mismas que al electorado inmediatamente lo remonta a épocas de corrupción, de alejamiento total del pueblo y enriquecimiento desmedido de sus gobernantes. 

Y hablamos sólo de las siglas, porque muchos de los militantes de ese partido ahora participan como parte del nuevo Gobierno y, también hay que decirlo, muchos realizaron sus encargos con profesionalismo y eso les permite, en los tiempos de la 4T, caminar con la frente en alto y presentarse en distintos eventos sin ser recriminados.

Entonces lo que tendrán que hacer en ese partido, como ocurrió con el de la Revolución Democrática (PRD), es ir a su extinción y refundarse, pero con nuevas siglas e imagen, puesto que las del tricolor ya no remontan bajo ninguna circunstancia.

Esa desaparición seguramente se dará en gran medida en el 2027, si no es de manera total, con lo cual dos de los grandes partidos del siglo pasado serán historia. 

Así que en el tricolor ya comenzaron a escuchar las campanas de despedida, pero también en ese ejercicio de competir solos en el PAN, aunque dicho sea de paso algunos lo miran aliándose con Movimiento Ciudadano. Ahora tendrán la oportunidad de medir la simpatía real con la que cuentan en el electorado y, si dejan las coaliciones de largo, fue una buena estrategia. Hasta la próxima.