Quintana Roo fue una de las 12 entidades del país que emprendió acciones para el rezago educativo y apoyo emocional, destacó el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
El organismo revisó la sistematización de la información disponible sobre las estrategias emprendidas para atender los problemas educativos que se agudizaron en la contingencia sanitaria y que posiblemente derivaron a la crisis educativa más grave que ha visto el país.
En particular, el organismo identificó las acciones estatales para enfrentar algunos retos y las categorizó en cinco áreas prioritarias de acuerdo con el objetivo de atención de cada una: pérdida de aprendizajes, apoyo socioemocional, capacitación docente, abandono escolar e infraestructura educativa.
En ese tenor, Quintana Roo ejecutó cuatro de los cinco puntos evaluados por el Imco.
Según el reporte, faltó incorporar acciones en cuestión de la deserción escolar, pues carece de programas para detectar la población en riesgo de abandono o estrategias de alerta temprana, atención personalizada por parte de autoridades educativas o de comunicación con tutores.
El listado indica que solo Aguascalientes, Durango, Guanajuato y Jalisco atendieron todas las áreas prioritarias de la política educativa.
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Destacan planes de QR contra rezago educativo
A nivel peninsular, Quintana Roo fue la entidad que más estrategias implementó, pues en Campeche carecen de programas de apoyo socioemocional y de abandono escolar, mientras que en Yucatán solo atendieron la capacitación docente y la adecuación de espacios educativos.
No obstante, el Imco reconoció que, en Campeche, así como en Guerrero y Durango, las autoridades educativas optaron por designar un día a la semana para atender a los alumnos con desempeño más bajo, mientras que el Yucatán se generó el Instrumento para el Diagnóstico de Alumnos de Escuelas Primarias.
“El 29 de agosto, cerca de 24 millones de niños, niñas y adolescentes regresarán a clases en un contexto educativo que aún resiente los estragos de la pandemia”, apuntó el Imco.
Recordó que, durante la menguada de los contagios, cada estado decidió la fecha de retorno a clases y definió si era presencial o híbrido.
Además, el Instituto explicó que el cierre prolongado de las aulas agudizó los problemas educativos en el país, por lo que es necesario “evaluar los esfuerzos realizados, medir sus resultados y ejecutar acciones para mitigar el impacto de la pandemia en los y las estudiantes”.
RICARDO HERNÁNDEZ
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