La Selección Mexicana venció por la mínima diferencia a Perú, y deja un mal sabor de boca en Pasadena, California, ante más de 68 mil aficionados que se dieron cita para alentar a los dirigidos por Gerardo Martino.
La primera media hora de juego poco y nada que rescatar con una selección mexicana con una posición de balón sumamente amplia tratando de hacer daño a través de latigazos con nula peligrosidad.
Ya para los últimos quince minutos de la primera mitad, Perú agarró confianza y fue más que México, con un buen ambiente en la tribuna, siendo lo más rescatable.
La parte complementaria mejoró en el ritmo de juego, ambas selectas proponían y buscaban el gol pero sin éxito.
La cascada de cambios no tardaron en llegar, y también la exigencia de los aficionados que pedían a gritos que el representativo mexicano hiciera un remate peligroso a puerta y fue hasta el 84’, cuando Hirving ‘Chucky’ Lozano se encontró la bola en tiro de esquina que mandó a guardar al ángulo para poner el 1-0 final.
Concentración de la selección mexicana, con muchas lesiones
La Selección Mexicana se llevó el partido por marcador de 1-0 frente a su similar de Perú, encuentro que no se le exigió prácticamente nada a Guillermo Ochoa, pero tampoco remataron a puerta más que en la jugada del gol.
Ahora solo queda esperar el siguiente duelo ante Colombia, el próximo martes 27 de septiembre a las 21 horas, tiempo del centro de México.
Con información de 24 Horas Nacional
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