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AMLO decide: todo el Gobierno, todo Morena, todo el tiempo en todo lugar

Es una calca del PRI desaparecido.

Todo Morena, todos sus gobernadores en Edomex

Cuando los gobiernos priistas se repartían territorios para respaldar a los candidatos, hacer campaña por ellos y asegurar sus victorias sin prurito moral o legal.

Y cuando en alguna entidad surgía una oposición vigorosa, entonces representada por Acción Nacional (Yucatán, San Luis Potosí, Durango, Chihuahua), mayores recursos se utilizaban.

Eran los tiempos del “partido casi único”, como lo definió Carlos Salinas en 1988 y, a partir de entonces, se preparó para compartir el poder por regiones.

Las vulgares concertacesiones mediante arreglos preelectorales o el retiro de candidatos ganadores (Ramón Aguirre, Guanajuato) o inclusive en funciones (Fausto Zapata, San Luis Potosí).

Ernesto Zedillo, con Esteban Moctezuma en la Secretaría de Gobernación (Segob), también quitó a Eduardo Robledo en Chiapas para conciliar con el perredismo de Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo.

Como esas negociaciones no podían ocultar los fraudes ni el poder del Estado desplegado para imponer ganadores, se dieron sucesivas reformas con la creación de órganos garantes de la democracia.

Institutos y tribunales hoy en riesgo.

ESTRENO DE CONSEJEROS

Pero el dinosaurio se asoma con fuerza.

Hoy el ensayo general se da en el Estado de México, donde se organiza la participación de los 22 gobernadores del partido oficial para aupar a Delfina Gómez.

Cada uno de ellos, por supuesto respaldados por el Partido Verde con Ricardo Gallardo, tendrá ciudades, distritos y municipios y deberán responder por los resultados.

A ellos se sumarán diputados y senadores, con quienes han conversado ya la propia Delfina Gómez y el administrador morenista por encargo de Palacio Nacional, Mario Delgado.

El frente es amplio y por supuesto no ignorarán a Armando Guadiana, aunque sus posibilidades de victoria en Coahuila sean menores y él no tenga necesidad de financiamiento.

Él sabrá cuánto gasta.

Como sea, la gran cruzada es por el Estado de México y veremos si los cuatro consejeros electorales a elegir operan con independencia y vigilan injerencias externas y desvío de recursos públicos.

APOYO DE CORCHOLATAS

1.- Delfina Gómez está preocupada por su caída en las encuestas y el sostenido ascenso de la priista Alejandra del Moral.

Por eso a los apoyos prometidos y enviados se suma la asesoría de las corcholatas a fin de integrarle un plan de Gobierno para promoverse en cuanto inicie la campaña oficial.

Es curioso: solamente Ricardo Monreal ha esbozado un proyecto para el próximo sexenio y aún así Gómez se coordina con gente de Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Claudia Sheinbaum.

2.- Ayer se dio por terminado el proceso mediante el cual se reeligió Rafael Riva Palacio en el Sindicato de Trabajadores del Infonavit.

Participaron casi tres mil agremiados, con un abstencionismo del 6%.

Y 3.- En Querétaro crece la molestia contra el morenista Gilberto Herrera por usar su estructura senatorial para atacar instituciones.

No se le conocen leyes, pero sí acciones contra el Gobierno estatal y la rectora de la UAQ, su sucesora Teresa García Gasca.

Cuando Herrera tuvo esa posición fue señalado por tolerar acosadores y abusadores, lo cual en 2017 detonó con el primer movimiento estatal de Me Too.