Han pasado 53 años desde aquel 20 de abril de 1970, cuando fue fundada Cancún, ciudad paradisiaca que hoy por hoy es el ensueño de turistas de todo el mundo, por sus inigualables atractivos de sol y playa.
Empero, su historia, en más de medio siglo de su instauración, se escribió entre selva, mar y cenotes, elementos que arropan a quienes la vieron crecer y a aquellos que deciden convertirla en su hogar.
Y es que Benito Juárez, municipio que alberga esta ciudad cosmopolita, joven y dinámica, es tierra de esperanza de una mejor calidad de vida que recibe con los brazos abiertos a quienes la eligen para escribir su historia en el paraíso.
“Todos somos cancunenses, hasta el que llegó apenas ayer, porque decidió que este era el lugar donde quería vivir y encontrar nuevas oportunidades” refiere la alcaldesa Ana Patricia Peralta de la Peña.
Brinda cobijo a más de 934 mil 189 habitantes, de los cuales, 49.6% son mujeres y 50.4%, hombres. De hecho, es el municipio más poblado de Quintana Roo, al que le suceden Solidaridad y Othón P. Blanco.
Sobre ese contexto, es un sitio que crece y moderniza su infraestructura conforme a las demandas ciudadanas, pero, al mismo tiempo, preserva aquellos lugares históricos donde se entretejieron los hilos que hoy sostienen el destino turístico por excelencia de México.
TESORO ESCONDIDO
Hace más de cinco décadas, era una zona desierta y pocos sabían de su existencia, ya que estaba ubicada en una región casi olvidada del Caribe Mexicano conformada por una serie de dunas de arena en forma de número siete, con un enorme sistema de lagunas.
Proveniente de la lengua maya, Cancún significa “nido de serpientes”, pues era un espacio selvático ocupado originalmente por los itzaes, un grupo indígena que descubrió la belleza de esta área determinó construir centros ceremoniales y de observación astrológica.
Posteriormente y de manera paulatina, el destino fue conocido y tomó relevancia a partir de finales de la década de los 60, cuando el Gobierno decidió emprender un proyecto de desarrollo vacacional que fue aprobado en 1969 y ejecutado el siguiente año por el Fondo de Promoción e Infraestructura Turística (Infratur).
El punto de partida fue abrir un camino de Puerto Juárez a la isla, diseñar un Plan Maestro de Desarrollo y construir una pista de aterrizaje provisional en un área de la avenida Kabah.
PRIMEROS PASOS
Bojórquez fue el primer sitio de hospedaje construido en lo que ahora se conoce como la zona hotelera de Cancún, que cuenta más de un millar de estos recintos. Abrió sus puertas en 1974 y recibió a los primeros turistas que se aventuraban a conocer las playas semi vírgenes este destino bendecido por el azul turquesa del mar.
Playa Blanca y Cancún Caribe también fueron de las primeras posadas en apostar por Benito Juárez y vieron el nacimiento de por lo menos otros mil 300 que actualmente atiborran la delgada franja costera del ya conocido mundialmente Boulevard Kukulkán.
También en esa década fue inaugurado el aeropuerto internacional, que cuenta con 2 mil 600 metros de pista y capacidad operativa para aviones de cabina ancha.
Ante el comportamiento de expansión de la ciudad, las agencias gubernamentales de Infratur y Foqatur se fusionaron para formar el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
PARAJE DE PESCADORES
Mucho antes de la fundación de Cancún, ya había habitantes en Puerto Juárez que se dedicaban casi en su totalidad a la pesca. De hecho, pasaron varias décadas, desde 1960 hasta 1990, en que fue considerada una localidad independiente a la demarcación; sin embargo, a finales del siglo pasado, eventualmente, fue incorporada a Benito Juárez porque ya era un área conurbada.
“Las comunicaciones de finales de los años 50 y los 60 para los que vivíamos en la zona norte y teníamos que ir a la capital a realizar algún trámite en el gobierno era muy difícil dadas las circunstancias de aislamiento que existían en aquel tiempo”, relata Juan Carrillo Padilla, pionero de Cancún.
Puerto Juárez siempre ha sido un importante punto, no sólo para los habitantes de Isla Mujeres, sino para los cozumeleños que viajaban en barco hasta este paraje para posteriormente trasladarse a Mérida, ya que la zona norte de Quintana Roo carecía de comunicación terrestre con la capital del estado.
“Cuando se comenzó a construir la carretera hacia el sur de terracería, sentimos un gran alivio porque llegó a Puerto Morelos y esto provocó que los barcos que hacían la comunicación a Cozumel salieran de ese lugar debido a que se acortaba el tiempo de traslado a esa isla”, detalló.
“Los barcos que salían de Puerto Juárez y luego de Puerto Morelos eran chiquitos, que surtían de mercancía y combustible a Cozumel, mientras que los pasajeros tenían como ocho horas de un viaje muy incómodo, especialmente si había viento del sur, pues hacían más tiempo de traslado”, compartió uno de los primeros hoteleros de Cancún, quien ha sido testigo del crecimiento del destino caribeño.
NACIDOS EN LA TIERRA PROMETIDA
Aunque la instauración de la ciudad ocurrió a principios de los 70, fue hasta mediados de esa década cuando instalaron el primer Registro Civil en el Palacio Municipal, es por eso que las primeras actas de nacimiento datan de 1975.
Por tal motivo, antes de ese año, los bebés que vieron sus primeros rayos del sol en este paraíso de mar y selva eran llevados a la metrópoli más cercana, Mérida, para obtener el documento de identidad.
“Como el Registro Civil empezó a funcionar en Cancún en 1975, muchos ya habían viajado a lugares de Yucatán a realizar sus registros de nacimiento, al no haber todavía ese servicio aquí en la ciudad”, explicó el director del Registro Civil, Marcos Basilio Saldívar.
Julio Eduardo Fernández Fuentes es una de las primeras personas cuya acta de nacimiento ratifica que es oriundo de Benito Juárez y, a sus 53 años de vida, se dice privilegiado de presenciar desde primera fila la evolución de la tierra prometida.
“En mi experiencia personal, me ha tocado verlo crecer. Viví toda mi infancia en la colonia Donceles 28, que es una de las primeras colonias de interés social aquí en la ciudad y ver crecer este destino con impresionantes hoteles y edificios, es increíble”, narra con orgullo.
Años después, en 1988, la oficina del Registro Civil fue trasladada al Parque de las Palapas, donde actualmente proporciona el servicio; posteriormente otras sedes fueron instaladas en las diferentes regiones para documentar el nacimiento de miles de cancunenses.
VIAJEROS DEL TIEMPO
Es 2070, los hijos y nietos de quienes forjaron la ciudad celebran el primer centenario de fundación en un monumento edificado en uno de los puntos de encuentro más relevantes de la urbe. Tal como fueron instruidos, abren las compuertas y ahí encuentran los tesoros resguardados por sus ancestros; un vistazo al pasado para valorar el presente.
“Cápsula del tiempo” es un proyecto propuesto por la asociación Pioneros de Cancún para dejar huella de la evolución y el legado del municipio, argumenta Carlos Cardín Pérez, exalcalde y dirigente de esta organización.
El plan, presentado ante el ayuntamiento, tiene como objetivo resguardar en un receptáculo los documentos históricos de Cancún de sus primeros 50 años, como el libro de oro, las primeras actas de cabildo, parte del Plan Maestro de Cancún e, incluso, algunas cartas de los habitantes de esta metrópoli, contenidas en USB, entre otros archivos que deberán ser develados en el 2070.
“El objetivo es que esta cápsula sea abierta el próximo 20 de abril de 2070 por los hijos y nietos de los pioneros, para que ellos hagan público el contenido”, explicó.
En tanto, mientras las autoridades municipales analizan la propuesta, para este 53 aniversario alistan un picnic en el que rememorarán anécdotas y vivencias de este lugar.
IMPERDIBLES DE LA METRÓPOLI
El amor por Cancún se demuestra a través de la promoción de sus lugares emblemáticos y eso la activista Tiziana Roma lo sabe, quien trabaja desde hace más de 13 años en la difusión de la historia de la urbe.
Como parte de su labor, escribió un libro dedicado a este destino denominado “Para entender y amar Cancún”, en el que relata la esencia de este paraíso costero al que llegó a los nueve años de edad.
“Me gusta pensar que cada persona que habita en Cancún se sienta cancunense, no importa de dónde provenga. Cancún es una ciudad hecha de gente cosmopolita, vibrante, dinámica”, presumió Tiziana.
“Yo llegué desde los nueve años aquí y tengo 57, así que prácticamente toda mi vida he estado aquí. Estudié en la ETI 257, en la Chichén y Bonampak, que empezó a funcionar en 1974 y ahora es la Técnica 11, Moisés Sainz”, relató.
Para la activista, Cancún cuenta con una magia sin igual y con lugares muy importantes en los que se ha construido su historia y muchos de los cuales concentra en su proyecto llamado “Tiziana´s walking tour”.
“De los lugares históricos que hay que visitar se encuentran la avenida Nader, las 15 casas que están ahí; el letrero de callejón del canicazo, el cual se ubica en el retorno de Huachinango y la avenida mencionada al lado de una casa iglú, el cual era un lugar de reunión de trabajadores después de arduas jornadas de trabajo por 1970”, detalló.
Otros lugares emblemáticos son el galerón de Infratur, el Jardín de la Nauyaca, el Mural del Chicle, la antigua cárcel, el Palacio Municipal, la Plaza de la Reforma, el Parque Nah y el Mercado de artesanías Ki-Huic.
En cuanto a monumentos, el dedicado a la historia de México, a José Martí, la Glorieta del Ceviche, sin olvidar el Parque de las Palapas.
También la antigua oficina del trabajador social, actualmente el Registro Civil, además de las “ruinas” del cine Blanquita y el auditorio Cecilio Chi.
Además de caracterizarse por tener un crecimiento turístico acelerado en su zona hotelera, el primer cuadro de la ciudad está plagado de historias y monumentos por conocer, tal es el caso de otras dos esculturas ubicadas en la avenida Sunyaxchen: “El Cantante” y “El Mensajero del Viento”, del artista Juan Rojas, que demuestran que esta metrópoli no sólo cuenta con playas, sol y diversión, sino también con riqueza cultural.
Con información de: 24 Horas Nacional
Síguenos en nuestras redes sociales ??