Las obras en la Reserva Ecológica Ombligo Verde arrancaron sin contar con la Manifestación
de Impacto Ambiental (MIA). El proyecto comprende la Supermanzana 34 y la mitad de la 33,
donde empezaron a construir banquetas.
Tulio Arroyo Marroquín, presidente de la organización Ombligo Verde A.C, denunció la falta de difusión hacia los vecinos de los proyectos que se tienen programados, los cuales, afirman, provocan ruido y afectan a la fauna.
Los trabajos arrancaron sin el permiso ambiental que otorga la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), destacó el activista que durante años ha encabezado la defensa
de dicha área verde urbana.
PODRÍA INTERESARTE: Analizan incremento a la tortilla
Precisó que el plan fue diseñado por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y que las constructoras licitadas se encargan del programa de manejo.
Arroyo Marroquín enfatizó que al carecer de una MIA, lo único que se podía iniciar era la
construcción de las banquetas, de las cuales en la actualidad no contaba la supermanzana 34.
“Tener banquetas favorece al peatón y estrictamente hablando, deberían existir desde hace
años”, subrayó Tulio Arroyo durante una conferencia de prensa para denunciar la falta de información sobre los proyectos.
Consideró que las personas que se quejan por el ruido y que, dicen, afecta a las aves, sería más razonable que reclamaran a la Dirección de Ecología por el alto volumen de las bocinas que usan
en la Catedral.
Se proyecta que la obra concluya dentro de ocho meses, para lo cual se tiene proyectada una inversión de aproximadamente 20 millones de pesos que se tienen contemplado que incluya reforestar el área que fue devastada, dijo.
Recordó que el pasado 22 de octubre de 2020, en el marco de la celebración del octavo aniversario de la Reserva Ecológica Ombligo Verde, se anunció la inversión por parte de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) para remozar las más de cuatro hectáreas que comprende.
Yuselim Reyes