Por Alejandro García
CANCÚN, Q. Roo.- La Asociación Mexicana de Desarrolladores Turísticos (Amdetur) no considera a Airbnb una competencia fuerte, debido a que son mercados completamente diferentes al tiempo compartido, que están enfocados en los baby boomers y la generación X.
Sin embargo, Miriam Cortés Franco, presidente ejecutivo de la Asociación de Clubes Vacacionales en Quintana Roo (Acluvaq), señaló que plataformas Airbnb no generan empleos (a diferencia de un hotel) y encarecen la renta de viviendas.
Los tiempos compartidos aún no abarcan la generación Z o millenials, que son los que principalmente prefieren alojarse mediante una plataforma de renta vacacional, que a decir de Amdetur le hacen competencia a los hoteles, no a los tiempos compartidos; sin embargo, esta nueva modalidad está ganando terreno.
En Quintan Roo son 200 desarrollos con 60 mil cuartos los que tiene Amdetur, que es 60% de la oferta de tiempos compartido, comentó.
Cancún captó 58% de todas las ventas de propiedad vacacional registradas en el país durante 2018, con dos mil 726 millones de pesos, de los cuatro mil 700 millones que reportó la empresa RCI (una compañía de intercambio de tiempo compartido con más de seis mil 300 resorts afiliados en 110 países) a nivel nacional; y esperan que el crecimiento al cierre de año sea de 7%.
En contraparte, en 2018 Airbnb alojó cerca de un millón de turistas, lo que representó un crecimiento de 35% respecto a 2016 cuando registraron a 271 mil en el estado, ganándole terreno a los hoteles.
La regulación de las plataformas de renta vacacional ha llevado un proceso largo pues, aunque se logró que pagarán 3% de impuesto por concepto de hospedaje, también se pretende delimitar su zona de operación por cuestiones de seguridad por medio de una calificación que tomará en cuenta diversos factores.
Miriam Cortés Franco dijo no estar en contra de esta aplicación, ya que genera impuestos, y es la tendencia, pero si se requiere que se regule y que sean los dueños de las casas o departamentos quienes reciban a quienes les rentan, y se entiende que es para ayudarse económicamente, pero que no sea ya un negocio, porque afecta a los cancunenses que se ven en la necesidad de rentar hasta la periferia, pues se encarecen las casas o departamentos en el centro.