Rocío Moreno Mendoza, titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso), rindió cuentas este jueves sobre los gastos realizados para atender la emergencia sanitaria de coronavirus en la entidad, ante los miembros del Comité de Participación Ciudadana (CPC) del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA); detalló la estrategia, erogaciones y contratistas usados en la entrega de ayudas alimentarias.
En rueda de prensa virtual, Moreno Mendoza informó que la Sedeso se basó en los estudios disponibles en el Coneval, relativos a las regiones con carencia alimentaria, como uno de los parámetros para selección de beneficiados con despensas.
“El criterio fue seleccionar aquellas con una carencia superior al 50%”, dijo.
También se contemplaron las colonias con los ingresos más bajos, incluso, a la clase media-baja, y a grupos vulnerables específicos. El acuerdo original era que el Gobierno estatal adquiriera el 50% de las 500 mil despensas. La otra mitad estaría a cargo de los municipios. Sin embargo, el estado terminó comprando 300 mil.
Los apoyos se entregaron hasta las puertas de las casas para evitar que las personas salieran y hubiera peligro de transmisión y contagio de coronavirus. Se estableció la necesidad de tener dos coordinadores generales, 11 municipales, armado de brigadas de hasta ocho personas y creación de aplicación móvil para comprobantes de entregas.
En total se atendieron 792 comunidades, dijo Rocío Moreno. Para recibir alimentos, la Sedeso firmó convenios de colaboración con asociaciones como Hanal y Caritas, así como con el DIF estatal, pues este último donó alimentos.
En una primera fase se entregaron 533 mil 028 despensas. En la segunda, luego de casi dos meses de repartir alimentos, se firmó un acuerdo con Segalmex para atender municipios con mayor afectación con pérdida de empleos en turismo, sobre todo de la zona norte.
Posteriormente, se firmó un pacto con los municipios para surtir y repartir despensas, abarcando colonias que no se habían cubierto antes.
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Rindió cuentas la Sedeso a comité ciudadano
Se incorporan Lázaro Cárdenas, Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos, Bacalar y Othón P. Blanco a la repartición de despensas.
El Gobierno adquirió 50 mil despensas más el 30 de abril y se adquirieron 185 mil 230 tarjetas para poder usarlas en la compra de alimentos.
Durante 80 días, con un ejército de tres mil personas y 121 vehículos, terminaron de repartir un millón 42 mil 900 despensas a lo largo del territorio nacional.
En la primera etapa se erogaron 90 millones de pesos; se adquirieron 300 mil despensas a Serel y Coma, a precios de 300 pesos cada una.
En la segunda etapa se gastaron 227 millones 614 mil pesos, invertidos en despensas adquiridas a Segalmex, Dominus México y a Toka, a quien se les adquirieron las tarjetas de despensa.
El resto de las despensas fueron donadas por el DIF estatal (105 mil), Segalmex (75 mil), Hanal (8 mil 600) y por municipios (243 mil 443). Además, Grupo Salinas y DIF-Unicef apoyaron con cinco mil despensas cada uno.
En cuanto al gasto operativo, se calculó que el costo por cada despensa entregada fue de 20.75 pesos. En total, el gasto operativo fue de 21.6 millones de pesos.
En el programa de apoyos específicos, informó, se dieron ayudas a 405 transportistas, guías de turistas y músicos; y 12 mil 400 a despedidos.
Con información de Redacción