El agua embotellada se ha esfumado de los anaqueles en los supermercados de Monterrey y su zona metropolitana, luego de que el gobernador Samuel García informó que el agua potable se iba a racionalizar sólo seis horas al día (de 4 a 10 am).
El desabasto se debe a las compras de pánico y algunos supers, tiendas de abarrotes y oxxos ya no tienen agua pura, pues la gente la está comprando para bañarse y lavarse las manos o los dientes con ella. A pesar de ello, la gente prefiere no llevarse la bonafont.
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Algunos vendedores han empezado a hacer “su agosto” y han encarecido el precio del agua llegando a cobrar hasta 100 pesos por garrafón de 19 litros.
El gobierno de Nuevo León emitió una alerta por desbasto de agua, ocasionada por sequías en la entidad, por lo que suspendió todas las actividades que ameriten un uso excesivo de agua.
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