Incrementan contagios de leishmaniasis en QR

RICARDO HERNÁNDEZ

En el último año se acumulan 416 casos de leishmaniasis en Quintana Roo, una enfermedad zoonótica transmitida por la denominada mosca chiclera que va en aumento como consecuencia del desarrollo urbano y de megaproyectos en zonas selváticas.

Incrementan contagios de leishmaniasis en QR

Así lo consideró Fernando García, docente de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), al advertir que se requiere divulgar más sobre la existencia y prevención de este padecimiento.

Se trata de una de las enfermedades de salud pública más desatendidas, de la que existe poca información estadística y menos educación para la prevención en comunidades rurales y escuelas, de acuerdo con el especialista, adscrito a la del departamento de

Medicina Preventiva y Salud Pública de la máxima casa de estudios del país.

“Es una enfermedad transmitida por vector. Se transmite por una mosca, un flebotomo, conocido como mosca chiclera, muy pequeñita. Su hábitat natural es selvas y bosques”, detalló.

“Es común que se haya visto un incremento de la enfermedad, puesto que estamos invadiendo cada vez más su hábitat. La gente va a estar más expuesta a esta enfermedad”, consideró el especialista.

TRATAMIENTO

Apenas el lunes pasado, la Secretaría de Salud de Quintana Roo (Sesa) informó sobre la llegada de 7 mil 300 dosis de glucantime, medicamento para el tratamiento de dicha enfermedad, abastecido por la Secretaría de Salud federal, a través del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece).

” Quintana Roo cuenta ya con más de 7 mil dosis de glucantime, medicamento indicado para el tratamiento de la leishmaniasis”, comentó el secretario.

Indicó que Quintana Roo es de las primeras entidades del país que recibe este medicamento, “el glucantime es una sustancia controlada cuyo uso es exclusivo de las autoridades sanitarias responsables de la vigilancia epidemiológica”.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), hay tres formas principales de leishmaniasis: la visceral (la más grave porque, a falta de tratamiento, casi siempre resulta fatal), la cutánea (la más común, que causa úlceras) y la mucocutánea (que afecta boca, nariz y garganta).

Con base en las estadísticas, cada año hay entre 700 mil y un millón de nuevos casos. Sin embargo, “solo una pequeña parte de las personas infectadas por el parásito acaban padeciendo la enfermedad”.

Entre los factores de riesgo están las condiciones socioeconómicas, malnutrición, movilidad de la población y cambios ambientales y climáticos.