Yahaira Janel Alejo, encargada del albergue estudiantil "Felipe Carrillo Puerto", en Chetumal.
Yahaira Janel Alejo, encargada del albergue estudiantil "Felipe Carrillo Puerto", en Chetumal. Credit: Marco Barragán.

Falta de alimentos y de recursos económicos son algunas de las dificultades que enfrenta durante el último mes el albergue estudiantil “Felipe Carrillo Puerto” de Chetumal.

Yahaira Janel Alejo, representante del albergue, comentó que dan acogida a un aproximado de 40 alumnos de distintas comunidades del sur.

En entrevista para 24 Horas Quintana Roo, dijo que con la llegada de la temporada electoral, el albergue quedó fue olvidado por el área gubernamental.  

Afirmó que varios acuerdos para otorgar despensas y hasta el pago de servicios fueron interrumpidos en detrimento de los estudiantes.

“No solamente el gobierno nos apoyaba, también empresarios y muchas de las ocasiones salimos a recolectar en la calle o a dar bailes con tal de que nos den una moneda que nos ayude”.

Yahaira Janel Alejo

Según Yahaira Janel Alejo, el albergue surgió como un proyecto para ayudar a los jóvenes que no podían gastar en transporte a que concluyan sus estudios en la capital.

Muchos de los jóvenes estudiantes presentaron complicaciones al no contar con vivienda ni medios de transporte, explicó Janel Alejo.

Graves carencias en el albergue

Sin embargo, expuso que el albergue enfrenta graves carencias, pues no lograron juntar dinero para pagar la luz.

“Al menos la sección femenil se vio afectada” ya que el suministro de energía eléctrica es indispensable para sus actividades escolares cotidianas.

Ante el difícil panorama, los mismos estudiantes salieron a las calles a pedir apoyo a la comunidad.

La representante señaló que el albergue cuenta con actividades extras, como dar cursos de redacción y matemáticas entre otros.

Manifestó que no solamente albergan estudiantes universitarios sino también a jóvenes de preparatoria.

Se acercan a las instalaciones con el fin de encontrar un lugar dónde quedarse en lugar de trasladarse a comunidades alejadas todos los días.

“No todas las comunidades tienen universidades, tienen que salir (los jóvenes) a fuerzas a la capital y se encuentran con algo peor ya que no cuentan con un lugar dónde quedarse y en ocasiones deben trabajar para costear gastos”.

“Lo que queremos es construir jóvenes capacitados, ya que en el albergue se dan clases de danza, canto, oratoria y poesía”.

“Entonces lo que hacemos es usar esos dones para no solo dedicarnos a una cosa” subrayó la representante.

Yahaira Alejo dijo que actualmente los estudiantes, al ver las complicaciones y el abandono de las autoridades, prefieren salir y ocuparse en lo que han aprendido a cambio de unas monedas.

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