Luego de un descenso en los homicidios durante la pandemia, en 2021 aumentaron ligeramente en Quintana Roo, informó este martes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los homicidios en 2021 fueron 677, informó el organismo, superior a los 628 que registró un año antes, en 2020, que fue el año de la pandemia, cuando se ordenó la suspensión de actividades y se recomendó el aislamiento voluntario.
Pero ahora que la pandemia ha sido más controlada, que la vacunación ha sido garantizada y que las actividades han vuelto a su normalidad, los delitos volvieron al alza.
El Inegi da un histórico del fenómeno delictivo. En 2011 se registraron 163, en 2012 fueron 154, en 2013 se apuntan 164, en 2014 se cuentan 125.
Luego, en los años siguientes fueron 145, 193, 455, 841, 750, 628 y los 677 de 2021.
Como se aprecia, fue 2017 el año de inflexión, cuando se pasó de 193 a 455 homicidios.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) da a conocer las estadísticas preliminares, 1 a nivel nacional y por entidad federativa, de los homicidios registrados en el país durante 2021.
Las estadísticas revelan que de enero a diciembre de 2021 se registraron 35 625 homicidios en México; es decir, una razón preliminar de 28 homicidios por cada 100 mil habitantes a nivel nacional.
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Suben ligeramente, luego de pandemia, los homicidios
La tasa es menor a la registrada para el mismo periodo de 2020, que fue de 29.
Con la finalidad de facilitar su comparación con la información de años anteriores, se agrega la serie histórica de la estadística definitiva de presuntos homicidios de 1990 a 2020.
Las presentes cifras se derivan de las Estadísticas de Defunciones Registradas y provienen de los registros administrativos de defunciones accidentales y violentas que generan las entidades federativas y que el INEGI recopila mensualmente.
Como fuentes informantes se consideran 352 Oficialías del Registro Civil, 105 Servicios Médicos Forenses y 260 Agencias del Ministerio Público que tuvieron, al menos, un registro de homicidio.
También se incluye la información de homicidios que resulta del avance en el proceso de confronta entre el INEGI y la Secretaría de Salud.
Desde 2015, el INEGI recopila información de presuntos homicidios directamente de los Servicios Médicos Forenses por medio de los certificados de defunción que emiten para las muertes accidentales y violentas.
Además, obtiene datos en las Oficialías del Registro Civil a través de actas y certificados de defunción.
Esta información se complementa con la que proporcionan las Agencias del Ministerio Público mediante los cuadernos estadísticos de defunción.
Los homicidios forman parte de las defunciones accidentales y violentas.
Su clasificación se determina con base en las causas (afecciones y lesiones), la presunción del tipo de defunción y el motivo de la lesión que registra el médico certificante en el certificado de defunción.
Las primeras dos son fundamentales para distinguir entre un presunto homicidio, un presunto accidente, o un presunto suicidio.
Ricardo Hernández
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