Critica Lydia Cacho a Bárbara de Regil; le pide que también alimente su cerebro
Critica Lydia Cacho a Bárbara de Regil; le pide que también alimente su cerebro

Critica Lydia Cacho a Bárbara de Regil; la actriz despertó polémica y todo tipo de reacciones en redes sociales al compartir un mensaje sobre la violencia intrafamiliar y de género.

“Si estás en una casa donde vives violencia, gritos, golpes, te pido que a esa persona que te golpea, grita humilla que te insulta, le pidas con todo tu corazón que te trate como te gustaría que lo traten, o la traten. Te pido por favor, que te toques el alma”, indicó la artista en redes sociales.

“Yo estoy en este mundo, en esta tierra para vivir feliz y tranquila, no para vivir con miedo”, completó.

Estas palabras la convirtieron en objeto de críticas por su aparente falta de sensibilidad y completa ignorancia en el tema.

Lydia Cacho también externó su opinión sobre las palabras de la actriz, a quien expresamente le dijo que “la ignorancia debe tener límites”.

“Una mujer, niña o niño están, en este instante, mirando aterrados a su agresor que se cree su propietario y sería capaz de asesinarles”, indicó.

“Bárbara, alimenta el cerebro también, el cuerpo no lo es todo”, señaló la periodista y activista.

Critica Lydia Cacho a Bárbara de Regil; no es fácil salir del círculo de la violencia

“¡Díganle a su agresor que ÔÇÿpor favor te trate como le gustaría ser tratadoÔÇÖ, aunque mueras en el intento… ¿cómo no se nos ocurrió antes? @barbaraderegil tanto ejercicio y no veo que te llegue oxígeno al cerebro”, escribió indignada la usuaria @marialimabit

“Jajaja Bárbara de Regil tiene una diminuta pizca razón, pero siempre encuentra la manera para no tenerla en lo absoluto”, posteó Enrique Barragán.

“Juanpa Zurita y Barbara de Regil nos demostraron, una vez más, que no darte cuenta de tus privilegios es vivir en una burbuja. Pero eso no sólo les pasa a los influencers, nos pasa a todos y todas. Cada uno somos privilegiados de cierta forma. No reconocerlo es parte del problema”, sentenció Toño Badillo.

Lydia Cacho, señaló: “Sí tiene cerebro. Sólo que tiene que aprender la fama conlleva responsabilidad. No se trata de humillarla sino de enseñarle el camino de la empatía y del entendimiento de los orígenes de la violencia”.

De acuerdo con los estudios, el problema es sumamente complejo: cuando la mujer está inmersa en el círculo de la violencia, cree que la conducta de su pareja depende de su propio comportamiento, se siente responsable e intenta cambiar las conductas del maltratador; al no conseguirlo, desarrolla sentimientos de culpa y verg├╝enza.

Además, se siente mal por no ser capaz de romper con la relación y por las conductas que ella crea para encubrir al agresor, como mentir y tolerar el maltrato a los hijos.

Con el paso del tiempo, el maltrato se hace más frecuente y severo, se desarrollan síntomas depresivos, como la apatía, la indefensión y la desesperanza. El último escalón de la violencia es el feminicidio.

En 1978, la psicóloga Leonor Walker describió el carácter cíclico del fenómeno de la violencia e identificó tres momentos: fase 1 o acumulación de tensión, fase 2 o del episodio agudo y fase tres o luna de miel o reconciliatorio, cada uno ligado al antecesor y que se repiten interminablemente.