ADRIAN TREJO

Alguien debería despertar al fiscal especial para delitos electorales, José Agustín Ortiz Pinchetti, que no vio pasar el tsunami de violaciones cometidas por servidores públicos del más alto nivel el fin de semana.

Desde gobernadores, pasando por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López y hasta el ¡jefe de la Guardia Nacional! Luis Rodríguez Bucio, bailaron sobre la Constitución y la legislación electoral.

Lo que pasó el fin de semana ni siquiera puede llamarse “un reto al INEÔÇÖÔÇÖ.

Fue la más cínica demostración de que las leyes -que Morena aprobó en el Senado en materia de revocación de mandato- les son un molesto estorbo.

Niegan oportunidad de incursionar en la política a quintanarroenses

El sábado, el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, organizó una marcha para la promoción de la consulta de revocaciónÔǪ acompañado por el secretario de Gobernación y el jefe de la Guardia Nacional.

Si esta demostración de valemadrismo legal hubiera ocurrido en los tiempos del PRI o el PAN, ya habría plantones y marchas por todo el país.

Pero tratándose de la muy particular interpretación de la ley que tiene la 4T, no pasa nada a pesar de que se utilizó un jet de la Guardia Nacional para transportar a Rodríguez Bucio, al otro López y a Mario Delgado.

Entre las funciones que tiene la fiscalía especial para delitos electorales está la de prevenir ese tipo de faltas a la legalidad.

A una funcionaria de la alcaldía Miguel Hidalgo trataron de encarcelarla hace unas semanas acusada del delito electoral de haber mostrado una foto de la boleta con el sentido de su voto.

¿Eso es más delito que los cometidos el fin de semana por servidores públicos?

Como sea, habrá que agradecer la sinceridad de dichos funcionarios sobre el respeto a las leyes que juraron guardar y hacer guardar.

Mantenerse en el poder y satisfacer un ego personal es lo primero.

Los mercados en antesala a la decisión de política monetaria de Banxico

****
Un tip para los habitantes de los estados más violentos del país:

Si quieren ver a sus gobernadores, investiguen en dónde habrá actos de campaña de los candidatos a gubernaturas porque ahí segurito los van a encontrar, de esta fecha hasta el primer domingo de junio.

Si no lo creen, ahí están las fotos de los muy sonrientes Indira Vizcaíno, de Colima, David Monreal, de Zacatecas y Alfredo Ramírez de Michoacán.

Muy sonrientes el trío se dejó ver en Aguascalientes, en el arranque de campaña de la candidata de Morena al Gobierno estatal, Nora Ruvalcaba.

A la candidata habrá que agradecerle que sacó de su búnker a la gobernadora de Colima, pues de no dejarse ver ya hasta se rumoraba que era una leyenda urbana.

De los otros dos gobernadores poco hay que decir.

Ahí están las cifras de muertos, las masacres cotidianas y su incapacidad para responder a la demanda de seguridad de sus gobernados, entre otros temas.

Pero las órdenes se cumplen, no se discuten.

Así que algún o algunos ciudadanos que quieran platicar con sus gobernadores, ya tienen una pista por dónde localizarlos.

De nada.

Arrancó la campaña por la gubernatura de Hidalgo, sobre la que pesa un halo de sospecha pues, dicen las malas lenguas, que el PRI estaría a favor de la aprobación de la reforma energética a cambio de mantener para sus colores el Gobierno local.

La versión parece bastante burda, pero se ha ido aderezando con hechos como la presentación de una iniciativa tricolor muy similar a la del Gobierno federal, justo por parte de un diputado empleado del coordinador Rubén Moreira, esposo de la candidata aliancista Carolina Viggiano, a la gubernatura.

A lo mejor fueron puras coincidencias.